Uno de los principales retos de Gillette es conseguir que el afeitado sea cada vez más sencillo y, de nuevo, ha conseguido dar un paso al frente en este sentido. Hace unos días la firma presentó su cuchilla Gillette Fusion ProGlide dotada con la nueva Tecnología FlexBall y en Trendencias Hombre ya hemos tenido la oportunidad de probarla.
Sí, también parece que uno de los retos de Gillette es poner nombres kilométricos a sus productos, que a este paso vamos a tener que estudiar un master para poder pedirlos en la droguería... En fin, bromas aparte, aquí van nuestras impresiones sobre esta nueva cuchilla y adelanto que son bastante positivas.
Tecnología FlexBall
Cuando parecía que Gillette había llegado a lo más alto en lo que a cuchillas se refiere gracias a la Fusion ProGlide y sus cinco hojas, ahora la marca nos sorprende con una innovación más: la Tecnología FlexBall.
¿En qué consiste? Muy sencillo, se trata de un mecanismo que va en el mango y permite que el cabezal de la cuchilla gire hacia los lados hasta un ángulo de 12º, adaptándose a los contornos del rostro y manteniendo un contacto óptimo con la piel para un afeitado suave y apurado.
En cuanto a las cuchillas, se pueden utilizar las Fusion ProGlide que, según mi propia experiencia, son estupendas, por no decir las mejores (aunque reconozco que desde que las uso no he probado de ninguna otra marca, así que no puedo comparar).
Mis impresiones
Como ya adelantaba al principio del post, mi opinión sobre esta nueva cuchilla es bastante positiva. La he utilizado en diferentes ocasiones y estoy muy satisfecho. En mi caso, la zona que más me cuesta afeitar es el cuello a la altura de la nuez y, aunque sigo necesitando más de una pasada para conseguir un afeitado apurado en ese punto, sí es cierto que lo he logrado mucho más fácilmente.
Además, he notado que el cabezal Fusion ProGlide se desliza con mayor suavidad si cabe, lo que, para qué nos vamos a engañar, es una auténtica gozada. Pocas cosas hay más desagradables a la hora de afeitarse que notar que la cuchilla avanza con dificultad y dando tirones.
El diseño es lo que no me termina de convencer. La goma esférica de color naranja que recubre el botón de expulsar el cabezal me parece bastante poco estético. Parece un balón de baloncesto y no termina de estar integrado con el resto del mango, negro y plateado y con un diseño mucho más tecnológico.
Como anécdota, en la versión Power, el botón para activar y detener la vibración va en la parte posterior del mango, a diferencia de la Gillette Fusion ProGlide Styler, que lo lleva delante. Así que me está costando un poco de trabajo acostumbrarme al cambio. Todavía, cuando quiero detener la vibración, busco el botón en el lugar equivocado. Pero bueno, no deja de ser algo sin importancia a lo que no tardaré en habituarme.
En definitiva, Gillette ha vuelto a conseguir que cambie de cuchilla de afeitar, pero sin dejar de ser fiel a Fusion ProGlide. Claro que ahora no puedo evitar pensar en qué será lo próximo. ¿Harán el cabezal del material de las manos locas para que se adapte del todo a la cara? ¿Nos harán un molde de nuestro rostro para diseñarnos la cuchilla ideal para cada uno de nosotros? Yo ya me espero cualquier cosa, la verdad.
Nota: el producto ha sido cedido por la marca para la prueba. Aquí podéis ver nuestra política de relaciones con empresas.
Sitio oficial | Gillette
En Trendencias Hombre | Gillette Fusion ProGlide Styler. La hemos probado